Huellas gastadas

Me tuve que colgar de los recuerdos
al caminar las huellas tan gastadas
que dejaron mis pasos sin memoria
y ausentes de colores los paisajes.

lunes, 5 de diciembre de 2022

Semáforo en rojo.

Con los huesos vencidos por el tiempo

y el alma carcomida,

 desconozco milagros y reniego

del stop en  entorno, reiterado.


Suspendida en el aire como hoja

sigo esperando el verde en el camino,

llega el amanecer y sigo en pausa

tragando a bocanadas este aire

que araña mi garganta.


Hay días que  pregunto por mi risa

o el eco de mi voz que ya he perdido,

es entonces que escucho el alboroto

de la gente feliz que vive afuera

y quisiera ponerme sus zapatos

un segundo.


Un cigarro, un café y las paredes

húmedas por la lluvia duradera,

un pesado silencio en este alto.


En la espera me pongo a dibujar

letras del alfabeto con historias

donde me reconstruyan,

y me vayan sacando ese mi yo interno 

que tiene voz y risa.


J. Eugenia Diaz M.