Estación del amor en la próxima parada.
Es solo para amantes de flores que agonizan
y de mantos de hojas cubriendo pretéritos
disipando sentires.
Los que buscan un
rayo de luz en el suelo
con nostalgia otoñal en medio de la bruma.
Que desde la ventana observan fascinados
su sepulcral avance dejando rosas secas.
Lo ideal es septiembre para el viaje
y llevar de equipaje páginas amarillas
tan llenas de saudades por las largas ausencias,
luz de una luciérnaga, algunas mariposas
el eco de las risas de tu gente querida.
Aquí nadie te espera la parada está sola,
el viento sopla helado y la calle esta oscura
otoño es tu destino porque el cielo esta gris
y las aves emigran.
J.Eugenia Dìaz M.