Es una sensación extraña observar algo roto en donde se va
filtrando todo, en donde ya nada se queda y se aprende a vivir en un entorno
diferente rodeada de una maravillosa insensibilidad que no siendo congénita llega
para quedarse como poderoso bálsamo.
A lo largo del tiempo se cuida con esmero y cariño entre las
manos lo que se ha amado y se deposita en un lugar especial para que nunca se rompa;
pero en algún momento de pronto sientes ese dolor punzante que te causa el ver cómo
se van rompiendo muchos de ellos y que angustiada intentas volver a unir cada pedazo,
cada momento, cada vivencia aun con el dolor que te causan las heridas en tus
dedos al hacerlo obligándote a soltarlos para siempre.
Puede ser algún lugar del que te has debido alejar para siempre,
alguna relación sentimental, dé amistad o familiar, y te duele ¡claro que te
duele! Porque te van dejando heridas que al final te convierten en un cedazo
que te ayuda a filtrar lo que viene, lo que sigue de este aprendizaje en donde
debemos soltar lo que ya no desea estar cerca de ti porque si insistes en
aferrarte te harán sentir una persona toxica sin serlo.
Y de pronto te llega esa analgesia que te deja continuar el
camino sobre los trozos rotos haciéndote sentir ajena a ellos con una fortaleza
que te hace diferente a lo que antes eras, ahora has desechado la vitrina donde
depositabas lo amado y lo especial para evitar lo cíclico, porqué ya necesitas algo
de sosiego en la vida y sobre todo aprender a amarte.
J. Eugenia Díaz M.
Ciertamente es una sensación extraña, pero a lo largo del tiempo vamos modificando criterios, haciendo romas las aristas y hasta más tolerantes con uno mismo y con el mundo. Me gusta tu reflexión, Eugenia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Francisco, gracias por tu compañía y tus palabras.
EliminarAbrazos.
Cuando se rompe algo, aunque sea por dentro, lo importante es encontrar todos los pedacitos y volver a pegarlo. Bonita reflexión...
ResponderEliminarUn beso grande, amiga.
Hola hermosa M. Roser.
Eliminargracias por pasar y dejar tu maravillosa estela de luz.
Abrazos.
Eugenia, a lo largo del tiempo aprendemos a soltar, a dejar ir. Todo cumple su tiempo y su lugar. Se van nuestros padres, amistades y proyectos que tanta ilusión nos costaron. Llega el momento de cuidar nuestra mente y nuestro corazón, renovarlo y recomponerlo, amiga. Cuántas cosas se rompen, nos dejan, desaparecen. Nos queda la fe, la fuerza y el ánimo para seguir empezando cada día, Eugenia.
ResponderEliminarGracias por tus palabras. Te dejo mi abrazo y mi cariño siempre.
Querida Ma. de Jesùs, agradezco infinitamente tu cálida compañía.
EliminarAbrazos con cariño.
Hola, regreso a visitar a mis amigos de la blogosfera entre los que te encuentras tú. Ha sido un verano, largo. cálido y extraño este.
ResponderEliminarQue bonito tu relato sobre el paso del tiempo y como va influyendo en nuestra vida respecto a lo que perdemos, a lo que amamos, a nuestros afanes, nuestras metas...Es un proceso donde vamos madurando, y a pesar de las heridas seguimos en pie intentado rescatar lo que realmente importa. Besos.
Hola Maripaz, que hermosa y generosas eres te agradezco me cuentes entre la lista de tus amigos de la blogosfera.
EliminarAbrazos,que estés bien.
Profunda y necesaria reflexión que parece anidar en ti desde ahora...
ResponderEliminarAbrazos Eugenia.
Hola Ernesto,es tan necesaria esa maravillosa sensación de insensibilidad para poder continuar, al menos para mi.
EliminarGracias por tu compañía.
Saludos y abrazos.
Hola Eugenia, cuando algo se rompe el corazón lo resiente, pero reflexionar sobre ello nos ayuda a sobre llevar en nuestro interior.
ResponderEliminarGracias por abrir tu corazón.
Hola Jorge, es una buena catarsis libera el lastre para poder seguir volando.
EliminarSaludos, gracias por pasar.
que maravilla de texto Me he metido dentro de tus letras gracias por compartirlas
ResponderEliminarHola Bella, me pone contenta saber que logro trasmitir el sentimiento con el que lo escribí.
EliminarSaludos y abrazos.
Bueno , me quedo con eso de aprender a AMARSE...creo de pronto en estos tiempos estamos llamados a eso, a reconocernos , a valorizarnos y buscar esa paz que solo en uno vive ...
ResponderEliminarHola Meulem,que bonito y original es tu nombre.
ResponderEliminarGracias porvtu compañía.
Abrazos.