es dolor que latiga los instantes sin tregua
y roza como espinas el hueco de mi vientre
y escalda la mitad del corazón
que persiste en latir sin un buen ritmo
que con la vida rime
soy la madre que llora y con lágrimas fabrica
unas alas que pesan anclándola al pasado
de una perdida guerra
que junta sus cenizas y transita de nuevo
en cuerpo de una extraña con sonrisa perdida
y sigue en el camino amputada del alma
que paso por mi mente el deseo de vengarme
o quitarme la vida
pero unas manos tiernas
y unos ojos verdes que tristes me miraban
me aterrizaron toda en sus cálidos brazos
cobijándome en ellos para esperar unidas
aquella mariposa que viaja eternamente
y pasa cada tanto dejándonos virutas
del polen de los cielos
aquella mi sonrisa esa que no imaginas
era como la luz del farol en mi casa
apaciguaba penas consolaba sollozos
y era paz en las guerras
con caña de pescar trato de rescatarla
amigo, compañero y maestro
no tienes mariposas porque ellas se han fugado
y vuelan adornando mi cielo encapotado
son como lucecitas que alejan mi tristeza
latidos del ayer unidos al presente
J.Eugenia Dáz M.
Y tú poema, qué me dices de tu poema. Por eso eres tan grande, compañera. Te aprecio un montón.
ResponderEliminarMi poema es el eco a lo que han provocado el regalo de tus versos, muchas gracías por tu amistad y generoso apoyo.
EliminarUn fuerte abrazo con mucho cariño y gratitud para ti querido compañero y amigo.
Y tú poema, qué me dices de tu poema. Por eso eres tan grande, compañera. Te aprecio un montón.
ResponderEliminarUn poema precioso que nos muestra el dolor de tu alma...Pienso que te ayuda a superarlo, el verde de unos ojos tiernos y el vuelo de las mariposas cual estrellitas que dejan una lluvia de amor...
ResponderEliminarBesitos, guapa.
El verde de unos ojos que siempre me acompañan, es el verde color de la esperanza y son los ojos de mi hija Lili.
EliminarY esas mariposas que con su suave vuelo acarician mi alma reconfortandola e inundandome de paciencia y resignación.
Gracía mi linda amiga M. Roser por tu siempre calido abrazo que acompañan mis letras.
Un besito.
Una buena coordinación a dos voces. Enhorabuena.
ResponderEliminarBesos.
Muchisimas gracías Francisco Espada me es muy grato tenr la compañia de su visita y comentario.
EliminarUn abrazo.
Eugenia, me encanta de qué forma sobrevuelas tu presente y miras tu pasado con la consciencia del dolor...Pero, a la vez sabes mirar hacia adelante, vislumbras esa mariposa, que sigue cerca, muy cerca...Ella te alienta, me impulsa y te inspira, estoy segura de ello...Bravo por tu valentía y tu grandeza interior, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo de luz y mi cariño, Eugenia.
M.Jesús
Ma. de Jesús querida amiga gracías por tu siempre calida compañia en mis letras tus palabras me llenan de aliento motivandome a continuar adelante.
EliminarBesos con mi gratitud.
Este poema es un collar lleno de perlas literarias y de las otras, las lágrimas guardadas en el corazón.
ResponderEliminarHermosa respuesta a Vicente.
Un enorme beso, Eugenia.
Hola Mirella, me llena de alegría tene la compañia de tu visita en este rinconcito de letras, agradezco tu calido y generoso comentario.
EliminarBesos con mi abrazo.
Palabras profundas y con razón de ser. Juego de la vida, que no siempre es sonrisa..., ¡pero es!
ResponderEliminarBuen poema!!
Un abrazo, Eugenia.
¡Hola Ernesto! que alegría verlo nuevamente visitando nuestros blogs muchisimas gracías por su visita y comentario.
EliminarUn fuerte abrazo.
Sentimientos desbordados de un dolor que aprisionamos al guardarlo tan celosamente en nuestro corazón.
ResponderEliminarNos conocemos muy poco, pero años se pasaron de mi vida sintiendo ese vacío, ese dolor, mientras tanto, vamos perdiendo el brillo de los ojos y la ilusión.
Los poetas cantan al amor y al desamor, pero siempre, en sus letras, puede que se escapen sentimientos de nostalgia de algo que en su vida existió.
Ha sido un placer recibirte en mi espacio, yo también he disfrutado y emocionado al leer tu poema, vuelve cuando gustes, siempre serás bien recibida.
Abrazos y mis cariños.
kasioles
Felices Fiestas, Eugenia, en compañía de tu familia y amigos.
ResponderEliminarUn gran abrazo.