Te llevo en mí, té siento en cada paso que doy
siempre estás en mis sueños, haces que te acaricie
como a el oso de felpa que acompaña mis noches,
juegas con mi deseo de apagar mis estrellas
dejándome en espera.
Con un aullido triste en mis labios cerrados
yo te quiero decir que pondré sol a mi alma,
lograre que detengas el tic-tac del reloj
para darles mordiscos a las nubes
y poder reposar en tu almohada de niebla.
Ya deja de brincar entre las cruces
¿acaso no me ves porque hay muerte en mis ojos?
porque llevo en las manos solo nidos con ramas
sin polluelos ni trinos.
Llévame no te temo, termina ya este andar
húmedo por ausencias.
Eugenia Díaz M.
25/11/2020
tus ojos húmedos de esperar de sentir gritar y quizás llorar
ResponderEliminartu poema es sublimemente ++++ bello Euge.mil besos
¡Hola bella!
EliminarAgradezco tu visita y tus calidas palabras.
Abrazos.
Un anhelo muy poético, tus metáforas acarician esa nostalgia, mucha sensibilidad en tu sentir.
ResponderEliminarAbrazos Azulgenia
Hola Jorge, gracias por detener tu paso en mi trabajo y fejarme saber que te gusto el poema.
EliminarSalydos un abrazo.
¡Bravo, Eugenia, por esa concentración lírica que acaricia los sentidos!
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenas tardes Francisco.
EliminarAgradezco su visita y su generoso comentario a mi trabajo.
Saludos con mi abrazo.
Hola Amiga!
ResponderEliminarEl osito de felpa cuenta estrellas contigo, para sustituir los sueños...Con el alma soleada, dormir en almohada de niebla, o en alguna nube con mordisqitos...
Besitos, mi sensible amiga.
Hola mi tierna amiga M.Roser.
ResponderEliminarEs lindo tener tu compañía y tu calido comentario.
Gracias por pasar.
Besitos.
En estos días anhelamos tantas cosas, qué bien lo expresaste, gracias Eugenia. Abrazos.
ResponderEliminarHola Xan Do Rio.
EliminarAgradezco tus palabras y compañía.
Cuídate, qué estés bien.
Un fuerte abrazo.
Gran expresividad en tu poema, Eugenia...Me temo que te estás dirigiendo a esa sombra oscura, que va unida a la vida, es la misma muerte, que siempre tenemos cerca.Bellas metáforas "ese deseo de apagar mis estrellas" "ese aullido triste en mis labios cerrados"No hay duda de tu valentía, amiga. Pero lo cierto es que "la vida empieza cada día" y hay que seguir recibiéndola,sintiéndola y agradeciéndola. Mi felicitación por la intensidad, la belleza literaria y la profundidad que nos dejas, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo admirado y mi ánimo siempre, Eugenia.
Hola mi querida y hermosa Ma. de Jesús, muchas gracias por tus palabras que acompañan maravillosamente este poema.
EliminarTener tu compañía es un regalo que siempre agradezco.
Me pone triste no poder leer las entradas de tu blog porque lo veo desfasado, demasiado grande.
Te dejo mi cariño y un fuerte abrazo, con mi deseo de que estés bien y te sigas cuidando.