Huellas gastadas

Me tuve que colgar de los recuerdos
al caminar las huellas tan gastadas
que dejaron mis pasos sin memoria
y ausentes de colores los paisajes.

domingo, 8 de agosto de 2021

Supervivencia.


 Hace unos días acompañe a mi esposo a las oficinas de Afore para el chequeo de la sobrevivencia, es un trámite para que continúe sin falla el pago de la pensión. Esto me hizo sentir que hemos llegado demasiado pronto a la etapa de vida en la que hacen este chequeo, pero es lo que hay y debemos seguir las reglas.

Ese día era temprano por la mañana, las oficinas se encuentran en el centro de la ciudad en un moderno edificio de varios pisos, nos estacionamos tres calles atrás en donde se ubica el barrio antiguo, me llamo la atención una finca urbana pintada de  color crema resaltando en azul rey el vano de la puerta, como queriendo sobresalir sobre las fincas grises a su lado, la única ventana  es de aluminio ese detalle me parece que descompone por completo la imagen arquitectónica de la casa, la ventana esta resguardada por una reja antigua y en donde antes había vidrio ahora la cubren papeles y cartón, como guardando con celo las historias que se han vivido allí.

Al observarla, he visto que le faltan pedazos de cemento en la fachada, que seguramente el paso del tiempo, el clima o tal ves la falta de mantenimiento la han dejado ese estado, esto me hizo reflexionar en el parecido que podemos tener nosotros con nuestras casas y en que como ese día acudíamos al chequeo de sobrevivencia ya más deteriorados, pero aun de pie y firmes en nuestros cimientos.

También me hizo pensar que estamos hechos de un resistente y buen material, cómo el de esa casa antigua, qué, aunque se ve algo dañada continúa dándole guerra a la vida vertiendo el poco color que aún posee a ese lánguido entorno, luchando por seguir vigente conservando en cada rincón su historia ya escrita, tratando de que lo falta por escribirse no termine con ese apagado tono gris, porqué tanto esa casa como nosotros nos debemos un final feliz en esta aventura de guerreros valientes.

 

J. Eugenia Díaz M.

5 comentarios:

  1. Me gustan tus comentarios llenos de dulzura de un alma libre que jamás se entrega. Me gusta tu forma frontal de ser y decir la cosas Eres feliz estás entera besos

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  2. Estimada amiga Eugenia:
    Espero que se solucionen con bien esas novedades familiares. Tengo una larga experiencia en problemas de columna lumbar y cuatro operaciones, que me dejaron dolor crónico por más de 25 años. La ciencia ha avanzado y ojalá todo salga muy bien.
    Un afectuoso abrazo.

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  3. Muy lindas palabras, un ejemplo de fortaleza y respeto, eres admirable amiga, mucha fuerza y cariño.

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  4. Excelente texto Eugénia!
    Todos somos bravos guerreiros neste mundo mergulhado em convulsões e incertezas. Saberemos resistir a todas as tentativas de nos aniquilar silenciosamente. Gostei muito do que escreveste!

    Te dejo mi abrazo!

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  5. Pues si necesitamos rebuscar en nuestro fuero interno esa fuerza , ese resquicio de fortaleza , templanza para sostenerse en la lucha que nos somete la vida y en unión con los que se ama poder seguir adelante...
    Ánimo y fortaleza , creer y todo será bendecido...

    Un abrazo.

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