Huellas gastadas

Me tuve que colgar de los recuerdos
al caminar las huellas tan gastadas
que dejaron mis pasos sin memoria
y ausentes de colores los paisajes.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Del dolor compartido hasta el dolor (Dedicado a la poeta y amiga Eugénia Díaz)

 
Del dolor compartido hasta el dolor
(Dedicado a la poeta y amiga Eugénia Díaz)


No me imagino tu dolor
ni puedo olvidar tus lágrimas.

Me pesan como un problema de niño,
como un desamor a los quince,
como el mar encima de mi cabeza
cuando buceo sin oxígeno.
¡Me pesa tanto!

Duele con ese dolor
que sólo una madre entiende,
que te destroza y te descoyunta el alma
como si nunca hubieras tenido alma.

Me duele porque sé lo que es
esperar pacientemente a la mariposa
y que no llegue y que se retrase,
como un tren lleno de estaciones de olvido. Sin pasajeros.

Duele ciegamente como un pecho con dos corazones enfermos
y atraviesa carne humana - tu carne-
con la desidia de un vengador de muerte,
como un soldado herido en la derrota
que lo ha perdido todo combatiendo.

Es como una miríada de polillas
comiéndose despacio la madera de nuestros riñones y de nuestros labios
y de nuestras manos sin huesos. Como un millón de polillas histéricas y depresivas.

Eres un pájaro con alas pero sin plumas
y yo soy el nido sin nido que decide
regalarte sus ramas secas y raquíticas.
Un nido sin árbol y sin tejado. Un no-nido a la intemperie.

No me imagino tu sonrisa
porque no quiero imaginármela ahora,
no quiero imaginármela nunca más.

Pero guardó un beso
tan pequeño y tan inútil como yo,
tan frío como la menta después de un trago de agua, en esa boca que casi no me mantiene.

Y hoy te lo regalo porque no me quedan mariposas.

Gracías Vicente Antón Vives por esta maravillosa poesía y tu calido abrazo fraternal entre tus versos.


4 comentarios:

  1. Tú te mereces esto y muchísimo más, mi querida Eu-Genia. Eres un ejemplo de coraje y valentía, además de tener un corazón tremendo de bueno y de humilde.

    ResponderEliminar
  2. Tú te mereces esto y muchísimo más, mi querida Eu-Genia. Eres un ejemplo de coraje y valentía, además de tener un corazón tremendo de bueno y de humilde.

    ResponderEliminar
  3. Felicidades por el regalo, siempre es bonito que a una le escriban versos...
    Muchos besitos , como pequeñas mariposas de colores, bonita.

    ResponderEliminar
  4. Mi felicitación a Vicente Antón Vives por su entrañable, humano y entrañable poema, donde nos deja su grandeza interior y su humildad al acercarse a ti con respeto y cariño a tu dolor y a tu persona, Eugenia.
    Mi abrazo inmenso para los dos, me alegro por vuestra amistad.
    M.Jesús

    ResponderEliminar