Le he encontrado calor al sol de enero
y al café matinal su saborcito
sin acercame al pan,y me limito,
de una vez ,a comer lo más ligero.
La piña y la manzana son primero,
después viene la sopa que vomito
pues no tolero el pollo,pero admito:
hay que bajar la panza y el trasero.
Ya no puedo trotar; solo camino
aunque me pone mal, porque es más lento
llevar todo ese peso a su destino.
Si quiero estar ligera como el viento
debo comer verduras como un chino
y mantener el cuerpo en movimiento.
y al café matinal su saborcito
sin acercame al pan,y me limito,
de una vez ,a comer lo más ligero.
La piña y la manzana son primero,
después viene la sopa que vomito
pues no tolero el pollo,pero admito:
hay que bajar la panza y el trasero.
Ya no puedo trotar; solo camino
aunque me pone mal, porque es más lento
llevar todo ese peso a su destino.
Si quiero estar ligera como el viento
debo comer verduras como un chino
y mantener el cuerpo en movimiento.
J.Eugenia Díaz M.
Juego de palabras entretenido y con un sentido real a tener en cuenta en muchas ocasiones.
ResponderEliminarFuerte abrazo Eugenia.
Hola Ernesto, contenta de tener tu compañia y comentario que agradezco mucho.
EliminarAbrazo con cariño,
Eugenia, nos dejas un atrevido, gracioso y original soneto, ahí podemos ver el deseo de adelgazar y recuperar la figura y la elasticidad...Te felicito por tu sentido del humor y esa superación constante,amiga.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, Eugenia.
Hola mi querida Ma. de Jesús agradezco saber que a sido de tu agrado el soneto en el que reflejo la diaria lucha que se vive cuando se esta en tratamiento de dieta.
EliminarGracias por pasar.
Besos, con cariño y gratitud.