La pasión no se ha muerto, está en receso,
intentemos, amor, en la alborada,
regresar la caricia retardada,
o inventar algo nuevo con un beso.
Vamos a confesar la fantasía
que ocultamos en sombras de la mente,
toma mi pecho erguido que, impaciente,
por volver a tu boca moriría.
Quitémonos la ropa sin rubores
dejémosla tirada como antes,
satúrate el olfato con olores
al recorrer mi cuerpo y por instantes
sea el postre mas dulce en la mañana,
danzando entre caricias como amantes.
J.Eugenia Diaz M.
enero/2017
Eugenia, tu poema tiene ritmo, frescura y gran belleza en la forma y en el fondo. Te felicito por esa superación constante que nos muestras, amiga...La poesía nos ayuda a sobrevolar la realidad y a lograr ese equilibrio entre mente y corazón, que siempre buscamos.
ResponderEliminarEspero que estés animada en este nuevo año, que ya vuela.
Te dejo mi abrazo y mi ánimo siempre.
M.Jesús
Ma. de Jesús querida amig, que grato es para mi tener tu compañia en mi rinconcito de letras y saber que te encuentras mejor de salud.
EliminarTe dejo mi cariño agradeciendo tu visita y con mis meores deseos para ti.
Besos.
Un poema magnífico con mucha pasión y ternura...A veces es bueno hacer un receso para volver a retomar el amor!!!
ResponderEliminarBesitos, linda amiga!
Hola Mi linda amiga M. Roser.
EliminarGracías por acercarte y dejarme la calidez de tu huella.
Besos, hermosa.
Me encantó el poema, Euge, y la forma tan delicada como expresaste el "receso" de la pasión.
ResponderEliminarQue este sea un año apasionado en todas las áreas.
Abrazos.
Hola Mirella hermosa, gracías por tu tiempo y compañía en mi espacio.
EliminarBesos, con mis mejores deseos para ti.
En el amor, el soneto se ensalza de una forma casi sobrenatural. Contigo todo cobra vida, y emoción. Me encantó, querida Eu-Genia.
ResponderEliminarHola Tin.
EliminarMi querido amigo Vicente me pone muy contenta tu visita en mi rinconcito de letras,gracías por pasar.
Un fuerte abrazo para ti.
En el amor, el soneto se ensalza de una forma casi sobrenatural. Contigo todo cobra vida, y emoción. Me encantó, querida Eu-Genia.
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